Esta técnica permite la medición de espesor de diversos materiales gracias a que para realizarla solo se hace necesario el acceso a una pared de la pieza a medir, permitiendo que se puedan medir estructuras como láminas, tuberías, válvulas, tanques y cualquier otro material sujeto a corrosión y desgaste. Esto se hace posible por medio de dispositivos denominados medidores por ultrasonido, que funcionan por medio de ondas longitudinales otorgando un valor del espesor de la estructura.
Es un método rápido, confiable y de mucha versatilidad, añadiendo además de que como no es necesario cortar o seccionar algún material, no es un método destructivo, y puede utilizarse para la medición de diversos materiales.
Los medidores de ultrasonido funcionan de acuerdo al tiempo de propagación del sonido, consiste en ondas que sobrepasan a la pared más accesible para la medición; a partir de aquí el dispositivo envía ondas sonoras que determinan el valor de lo que se quiere medir (espesor, distancia, dureza o caudal) al llegar estas ondas al material a evaluar.
El método de medición por ultrasonido es útil a la hora de hacer comprobación de fallas en las estructuras. Los medidores envían ondas sonoras que alcanzan frecuencias entre los 500kHz y 50 MHz a través de diversos materiales conductores.
Es un método con muchas ventajas, al ser no destructivo y bastante versátil. Cuenta además con un alcance de alrededor de 20 metros para elementos cuya pared de acceso sea de acabado liso o de pocas capas de pintura y da resultados bastante aproximados para los elementos a los que se desea hacer medición.